Libre albedrío, a mi parecer la frase menos comprendida en la Biblia. El libre albedrío nos permite unirnos al rebaño, pueblo escogido, congregación o pertenecer al mundo y sus consecuencias. Este año hemos visto como algunos líderes religiosos, y nótese bien, LÍDERES de iglesias, no comprendiendo esta separación divina, enfrentan gobiernos, grupos de personas que no pertenecen al rebaño, pueblo escogido o congregación, intentan por todos los medios de forzar el medio de vida que algunos desean vivir. Humillan a quienes no son heterosexuales, les imponen versículos bíblicos, hacen pasar un bus con escritos referentes a este tema por las calles principales de las ciudades, escoltados por la policía, otros pisotean símbolos homosexuales en programas de televisión…
Yo me pregunto… ¿Por qué?
¿Quien les da la potestad de hacer algo así? ¿Dios? ¿Acaso Dios se contradice? O somos nosotros los que, en este evangélico estilo de leer sólo un par de versículos bíblicos, sin entender el contexto, distorsionamos los mandatos de Dios y los aplicamos a quienes no quieren seguirlos, por decisión propia, porque son libres de hacer lo que quieran, porque no pertenecen al rebaño, pueblo escogido, congregación, porque tienen libre albedrío.
Hace un tiempo compartí un diagrama de flujo de cómo funciona el cristianismo, puede visitarlo aquí, si tiene dudas sobre lo que significa «ser» y «no ser» cristiano.